
El testamento es ese documento legal que se utiliza para facilitar el reparto de la herencia entre los familiares una vez que la persona, dueña del testamento, ha fallecido. Aunque también se pueden utilizar para repartir los bienes de una persona, dentro de los límites que dicta la ley. La gran mayoría de las personas, ya sea por las películas o porque lo han vivido en primera persona, saben la función de un testamento, pero existen ciertas cuestiones que pueden parecer sorprendentes dentro de esta figura legal.
Y es que si te pensabas que todo el mundo puede hacer un testamento, estás equivocado, ya que, hay personas que no pueden ni hacer testamento, ni elegir el tipo de testamento que quieren, hablamos de las personas menores de 14 años, ya que, los menores de 18 años pueden, de forma exclusiva, otorgar testamento ológrafo. Tampoco pueden hacer testamento las personas que a la hora de redactar el testamento no están en su sano juicio, aunque sí realizaron el testamento antes de la enajenación mental será válido. En los casos en los que la persona ha sido incapacitada a través de una sentencia, serán los notarios los que designen a dos facultativos que certifiquen si son capaces o no de otorgar un testamento.
Sea cual sea tu caso, si quieres realizar un testamento pero no tienes muy claro, cómo realizarlo o si tienes algún tipo de limitación, ven a visitarnos o contacta con nosotros directamente, para que unos profesionales del derecho de familia puedan ayudarte a resolver cualquier tipo de duda que tengas.